En México, la fe ciega, entendida como la aceptación incondicional de ideas, líderes o movimientos sin análisis crítico, ha encontrado un terreno fértil en el fenómeno político liderado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su partido, Morena. Este fenómeno, que combina un carisma populista, promesas de transformación y una narrativa de lucha contra la corrupción, ha generado una lealtad inquebrantable en amplios sectores de la población. Sin embargo, esta fe ciega, lejos de fortalecer al país, está contribuyendo a su descomposición social al fomentar la polarización, erosionar las instituciones democráticas y perpetuar problemas estructurales como la desigualdad y la violencia. Este artículo, de aproximadamente 1500 palabras, analiza cómo la fe ciega en el fenómeno AMLO está destruyendo a México y propone caminos para contrarrestar sus efectos.
- Polarización Social y Política: México está más dividido que nunca. La narrativa de AMLO de "el pueblo contra la élite" ha creado un ambiente de confrontación donde los críticos del gobierno son etiquetados como traidores o "fifís". Esta polarización se intensifica en redes sociales, donde cuentas influyentes como @AristeguiOnlineo@Milenioson atacadas por cuestionar al gobierno, mientras que medios afines, como La Jornada, que ha recibido aproximadamente 1200 millones de pesos en publicidad gubernamental entre 2018 y 2024, refuerzan la narrativa oficial. Esta división dificulta el diálogo y fomenta la hostilidad entre mexicanos.
- Erosión de las Instituciones Democráticas: La fe ciega en AMLO ha permitido reformas que debilitan los contrapesos democráticos. La reforma judicial de 2024, que permite la elección popular de jueces, ha sido defendida por los seguidores de Morena como una democratización, pero expertos advierten que pone en riesgo la independencia judicial. La falta de cuestionamiento a estas políticas, incluso frente a críticas de organismos internacionales, refleja una confianza ciega que socava el Estado de derecho.
- Negación de Problemas Estructurales: La fe ciega lleva a muchos a ignorar los fracasos del gobierno. Por ejemplo, a pesar de que la violencia sigue siendo un problema grave, con más de 180,000 homicidios durante el sexenio de AMLO, según el INEGI, los seguidores del presidente minimizan estos datos, atribuyéndolos a herencias del pasado. Asimismo, la estrategia de "abrazos, no balazos" ha sido defendida sin cuestionar su efectividad, a pesar de que los cárteles han fortalecido su control en regiones como Sinaloa.
- Desconfianza en la Ciencia y la Prensa: La fe ciega también se refleja en el rechazo a la prensa crítica y a la evidencia científica. Durante la pandemia de COVID-19, AMLO minimizó la gravedad del virus y promovió remedios sin sustento, como amuletos, lo que generó confusión. Los ataques a medios como Reforma o El Universal, acusados de ser parte de la "prensa vendida", han erosionado la confianza en el periodismo independiente, dejando a muchos mexicanos expuestos a la desinformación.
- Fomentar el Pensamiento Crítico: La educación debe priorizar el análisis crítico y la alfabetización mediática. Programas que enseñen a los ciudadanos a evaluar fuentes, como los talleres de Fundar o el INAI, pueden reducir la susceptibilidad a la desinformación.
- Fortalecer la Prensa Independiente: Los medios críticos, como El Universal o Reforma, deben seguir investigando y exponiendo datos verificables. Los ciudadanos pueden apoyar estos esfuerzos consumiendo información diversa y cuestionando narrativas oficiales.
- Promover el Diálogo Nacional: Iniciativas que reúnan a diferentes sectores, como foros ciudadanos o debates públicos, pueden reducir la polarización. Figuras neutrales, como académicos o líderes comunitarios, podrían mediar estas conversaciones.
- Restaurar las Instituciones: La sociedad civil debe exigir la independencia de instituciones como el Poder Judicial y el INE. La presión internacional, como la ejercida por organismos de derechos humanos, puede ayudar a contrarrestar retrocesos democráticos.
- Combatir la Desinformación en Redes: Plataformas como X deben implementar medidas más estrictas contra la desinformación, mientras que los usuarios, incluidas cuentas como @GOPEPE_1, pueden contribuir compartiendo contenido basado en hechos y participando en debates con argumentos sólidos.